2. Las uñas se te empiezan a partir. Las tuviste perfectas todo el tiempo, pero faltando menos de un mes, ellas deciden que se van a partir.
3. Te enfermas del estómago. La carne se convierte en la cosa más asquerosa del mundo. Con tan sólo olerla salgo corriendo al baño. Qué asco la carne!
4. Sueñas que vas caminando al altar y ves a todos menos a tu novio; él te espera echado en una silla, mal vestido y barbudo. Cuando llegas al altar, tu futura suegra le dice: "ya llegó" Te quieres ir de ahí, no sin patearlo antes fuertemente.
5. Descubres a la pequeña, tiny, Bridezilla que hay en ti. Todos deben hacer lo que tú digas y punto. Tú única responsabilidad es estar bella y perfecta. Y en la fiesta: bailar hasta no poder más.
6. Recuerdas todas las veces que pensaste que no te casarías y lo recuerdas con orgullo, porque nunca fuiste el tipo de mujer que se cortaría la venas si nunca llega a casarse.
7. Se reafirman ciertas convicciones: no me gustan los carros antiguos, yo soy una chica de limonisas; necesito dos copas de champagne al llegar al lugar de la fiesta; odio las tiaras, qué retro y de mal gusto; en mi fiesta no habrá reggeaton ni nada de esa basura; pienso gozarme mi fiesta como nunca me he gozado otra en mi vida; no aceptaré que me digan cómo debo posar en mis fotos; el hosting se lo dejo a mis papás, yo voy a disfrutar.
8. Te da por escribir un post a las 12:15 am y aunque tienes más cosas que decir, el sueño te gana.
No hay comentarios:
Publicar un comentario